Economía doméstica

La economía en la práctica es una cosa sencillísima: Tengo ESTO, gasto un poco menos de ESTO y me sobra UN POQUITIN. ¡Chupao!. Lo malo es que hay que empezar teniendo ESO, si no ya vamos fatal.

En la época pre-crisis, se hacía una ecuación muy diferente: No tengo NADA, pero pido ESTA BARBARIDAD y tendré TODO, aunque acabaré debiendo MUCHISIMO. Y ahora es cuando nos piden devolver la BARBARIDAD y el valor de lo que tenemos (a débito) es CASI TODO.

En fin, comenzó ya el tuentileven (2011) con una inflación que ronda el 3%, con unas subidas  de impuestos directos aproximadas de 7,3 % en el tabaco, la luz 10 %, gas otro 4 %, los trenes y transportes un 3 %, amén de la subida previa del IVA, y otras minucias en alimentos básicos…

Así que como los sueldos de funcionarios, sufrieron un recorte del 5 % de media, y a los pensionistas otro tanto de la misma medicina (unidosis)… O sea que, hagamos lo que hagamos, digamos que hemos comenzado el año siendo directamente esquilmados legalmente.

Pero si tenemos una capacidad de gasto un 10 % inferior al año anterior, pongamos que somos mileuristas, es que entre pitos y flautas, un mes entero de trabajo se nos va a ir – sin sentirlo- en pagar esos impuestos que nos han incrementado. Vamos a trabajar un mes gratis para donación al Estado. El resto del año, como habitualmente, serán las retenciones a cuenta del IRPF, S.S. etc. las que nos seguirán haciendo un roto en el bolsillo. Y todos tan contentos.

Pero ante la adversidad hay que hacerse fuertes y más «mirados», o sea más conscientes de lo que gastamos y en qué. Por ejemplo si mi coche me come por los pies por echarle gasoil, dejo el coche en el garaje y santas pascuas. Si el gas para calentar toda la casa cuesta un dineral, volvemos a la salita de estar, con una mesa camilla y un brasero, y el resto lo habilitamos como parque natural para aves antárticas. Un precalentón nocturno al dormitorio comunal (nada de una habitación por barba) y a aportar calor corporal a nuestro clan.

¿Qué es eso de entrar a un bar a tomarse una cañita o un cortado para fumarse un cigarillo?. Nada de nada, aplicamos la ley anticapa de ozono, y nos ahorramos ese par de cigarritos, más  1,20 € del cortado. Total ahorro 1,60 €.  No iba desencaminado el ministro…

Nada de ir a las rebajas, que luego acabas picando. Dejémonos de fiestas comerciales, nada de San Valentines, ni días del Padre de la Madre y de su… ¡eso que pensais!.

Otro aparato inútil donde los haya, es el Esemeseador móvil. A quien coño le importa si llegas cinco minutos tarde a la cita. Ya saben que eres impuntual, y él/ella tampoco estará a la hora prevista. Dejaos de cruzar SMS para confirmar que el BUS está en la calle tal, esquina cual. Por supuesto partíamos de que el coche está en el garaje, porque además de no gastar combustible, te ahorras la zona azul (en Zaragoza más o menos 1€/hora), porque a los escasos Parkings privados no hay quien se atreva a entrar, salvo que estés dispuesto a pagar unos 2€ por el mismo tiempo. No digamos si el municipal de turno tiene la muñeca caliente… y se lo has puesto a huevo. Papeleta amarilla y ¡a casita que llueve!. Por no decir de la obsesión de clavar la aguja en el 50 km/h. En vez de mirar a los peatones que cruzan por cualquier lado, hay que controlar la velocidad, no sea cosa que te haga la foto finish cualquier patrulla de asalta incautos. No importa atropellar a un «delincuente» que ha violado la ley cruzando por donde no está permitido, siempre y cuando lo hagas por debajo de la velocidad máxima permitida en vías urbanas.

La factura de la luz no tiene ninguna importancia, siempre y cuando te vayas acostumbrando a la penumbra. Para qué encender la luz del pasillo si es completamente recto, y lo has recorrido miles de veces a «ciegas». Sabes dónde está la puerta del baño, el retrete, y no hace falta mirarse el culo para aliviar las penas. Nada pues de leer sentados en el retrete, cosa muy habitual entre los hombres. Desde hoy a cagar a oscuras y sin el periódico del día anterior. Y el pis, nada de discutir más por si dejas gotas en la tapa, todos sentados y sin necesidad de apuntar, ni de sacudidas innecesarias e inútiles que además van a parar siempre directamente a donde tu chica más odia… eso es ¡la tapa del báter!.

Los leds del STAND BY, a tomar por… (volvemos al párrafo retrete). La tele, el equipo de música, el PC, el DVD, etc. con el botón de apagado siempre. Mejor al de la tele ni darle nunca al ON, pero allá cada cual. Y si me apurais se meten todos en un lote en E-Bay y nos quitamos un montón de basura de casa.

Las llamadas perdidas en mi móvil, definitivamente son lo que se define en el DRAE (1. adj. Que no tiene o no lleva destino determinado), o sea que se pierden definitivamente. Si alguien llama para algo necesario seguro que vuelve a intentarlo más de una vez, y si era para una tontería le has hecho un favor no contestando, siempre que tengas desactivado el contestador de voz, porque le has ahorrado una llamada.

Nada de relación social con los amigos. El que quiera hablar que se junte en la peluquería. ¡Qué es eso de tener que hablar en un bar!. Ayer me sentí muy triste en un bar sin humo. Apenas dos parroquianos echando la partida, el dueño con una camiseta de thermolactyl para salir a la calle de vez en cuando a echarse un piti, y yo haciendo el capullo con la cerveza  y los amigos adentro y mi «yo imbécil! pegado a mi cigarrillo que estaba en la puerta del bar…

Así que a partir de ahora, las cervecicas en casa, los cortados para los ricos, y los bares que no puedan poner terraza tendrán que echar el cierre por falta de clientela. ¡Lo siento por ellos pero este menda no puede coger una pulmonía por culpa del tabaco!.

Echemos cuentas pues del ahorro que supone esta actitud:

Un ciudadano normalito, elimina del orden de 5 cortados semanales en el descando laboral (6€). Si toma una cañita con tapa cada día alrededor de 10 € semanales. Vermú de los domingos variable, digamos que una pareja con un par de cañas y dos tapitas le sale por otros 6€ semanales. Dejar de fumar  cinco cigarrillos al día suponen a la semana otros 6€ . No coger el coche durante toda la semana, evitando hacer unos 200 km. extras suponen unos 12 €, más los parkings otros 6 €. No llamar con el móvil oscila entre personas, pero echando por lo bajísimo otros 12€ semanales. Los ahorros en luz y calefacción son menos evaluables ahora, pero calculo que pueden rondar los 6 € semanales. Así que con estas pequeñeces sumadas, en una semana,  ahorraríamos  alrededor de 64 €. Y con 52 semanas que tiene este 2011, estamos ahorrando unos 3000 € per cápita. Parece una tontería verdad. Pues es muy fácil echar estas cuentas cada uno de nosotros y saber que en estas cositas se nos va un pastón. Claro que para cumplir con ello tenemos que dejar de ser españoles, olvidarnos de nuestra cultura, tradiciones, forma de entender la vida, relación social entrañable, ir por casa abrigados, eliminar hábitos ancestrales, y hacernos sajones, de los de toda la vida.

Y encima de todo ello asumir el estigma de que somos antisociales, porque si no nos gastamos lo poquito que tenemos, así no se recupera la economía del país. Y se incrementará el paro, y no se generará nuevo empleo, cerrarán pequeños comercios, bares, taxis, dejará de circular el dinero, seguiremos sin poder pagar la hipoteca y encima nos volverán a subir los impuestos para recaudar más de lo poco que se gaste… Así que no me hagais ni caso, vosotros a lo vuestro a gastar a troche y moche, a ser cívicos, y a levantar el país.  Os dejo que me voy al bar a echarme un cortado hasta que llegue la hora de la cañita. ¡Salud!

Acerca de Carlos

Expiloto de líneas Aéreas, aficionado a las artes: Pintura, Literatura, Música, Fotografía, con ganas de divulgar aquello que he vivido a lo largo de mi experiencia profesional y humana..

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