Puesto que no está plenamente determinado el origen de esta frase, os recomiendo que al menos hagais caso de la recomendación. Máxime si tienes que ir a un médico, y si además se trata de un ginecólogo… podría ocurriros lo que nos cuenta esta presentación tan chula que me han mandado por correo…
Espero que tú no tengas que ir nunca al gine. De todos modos seguro que vas de acompañante alguna vez. Aunque no creo que atí te dediquen una decoración tan «mimada». :p
Muy bueno Carlos, no se como el médico no se ruborizó 😛