(ilustracion de Zengarden)
En Zaragoza, e imagino que en el resto de España, se ven estos días infinidad de parejas de novios haciendose fotos por cualquier rincón «típico». Al fondo el Pilar, la Seo, o un portón antiguo que da textura al fondo.
Cuando vivía en Salamanca casi todas las parejas de recién casados acudían al mejor escenario posible, la Plaza Mayor, en la que los miles de «mirones» que veíamos pasar la vida desde una de las muchas terrazas que la jalonan, no podíamos reprimir una ligera sonrisa al verlos posando entre una multitud de curiosos o despistados correcaminos alrededor de la misma…
Cada pareja tiene un montón de recuerdos agradables de determinados puntos de su ciudad o de su pueblo, de una ermita solitaria, o de un pequeño restaurante en el que se han hecho muchas confidencias hasta dar el paso de casarse.
En mi boda no hubo fotógrafo oficial, soy un poco raro, porque a pesar de que hay muchísimos profesionales de la fotografía nupcial, cuyos trabajos son maravillosos, yo quería que mi boda fuera natural, sencilla y disfrutar del momento en familia y con los amigos. No estaba dispuesto a andar de acá para allá buscando el mejor fondo, esa luz de tarde terrible que acaba quemando la foto, o poniendo cara de alegría cuando estás muerto de sed y nervioso para no llegar tarde al banquete.
En nuestro caso sustituimos los posados por unas cervezas con los amigos en la plaza de San Francisco, y luego todos a cenar, juntos y descansados. Así que el reportaje fué uns serie de diversos disparos que unos u otros hacían con buena voluntad y poco oficio. Pero tenemos magníficos recuerdos de esos instantes captados sólo con cariño.
Este año tengo boda, y pienso disfrutar en ella de lo lindo. Han hecho todo lo humanamente posible para que sus invitados disfrutemos con los novios de una gran celebración. Está todo planificado, meditado y organizado para que todos podamos sumarnos a la alegría que genera una boda o casamiento.
Pero hoy yendo de acá para allá entre páginas web y blogs, me encuentro con una empresa de organización de bodas. Ha sido por casualidad y me ha llamado la atención y me ha sorprendido gratamente el hallazgo. La página en cuestión es bodaclick, y de cara a una pareja de novios es una buena solución para preparar la boda sin que se pase ningún detalle por alto. Seguramente hay muchas más, pero no me he molestado en hacerlo, ya que no tengo ninguna intención de volver a casarme en los próximos cincuenta años. Pero tal vez a alguno de vosotros os interese saber que existen este tipo de organizadores que te lo dan casi todo hecho. ¡La alegría hay que ponerla los demás!…