Según las estadísticas que se publican el incremento de la compra on line está superando casi al comercio tradicional, tanto en volumen como en la variedad de ofertas. Hay perfiles que se adaptan a un tipo u otro de compra, a determinados productos que sean necesarios. o simplemente están buscando regalos originales y gadgets. Todo es posible encontrarlo ya en la red, y en la mayoría de las ocasiones a un precio menor que en una tienda física.
La confianza en materia de seguridad con el pago está creciendo y por tanto, quien más o quien menos ha hecho alguna compra on line. Mi experiencia a través de nuestra tienda es sorprendente con un producto tradicional como es el turrón. ¡Quien iba a decir que los clientes de siempre serían los pioneros!. Gente en su mayoría de una edad avanzada, que conocen el producto, la forma de hacer y el mantenimiento de una tradición que ahora puede llegar a cualquier rincón del mundo sin haber perdido nada de calidad.
Cada negocio tiene un sitio en la red, cada distribuidor se encarga de ofrecer el mejor precio y el mejor servicio, y la competencia en este sentido hace que el margen de beneficio se reduzca de la misma manera en que el ahorro en gastos fijos lo permite.
Estamos asistiendo a una globalización imparable y determinante del modo de comprar. Ahora ir a ver escaparates es una actividad casi informativa. Primero ves lo que te interesa y te quedas con el precio, y luego miras por internet si hay algo más barato o mejor… A partir de ahí es ya sólo una cuestión de decidirse por una opción u otra.
En mi caso nunca me ha gustado ir «de tiendas», y sin embargo buscar lo que realmente quiero a través de la red me resulta entretenido y comodísimo. Recuerdo mi deambular por calles comerciales sin tener ni idea de lo que quería, dando vueltas como un auténtico zombie, en busca de algún regalo «original» (una colonia, un libro, un disco…), quizás un reloj de oferta, o alguno de los gadgets y consumibles sin los que estamos «vendidos» cuando se estropean.
¡Felices compras!… ¡ON-LINE!.