HOY ES EL DIA EN CONTRA DE LA VIOLENCIA DE GENERO y por ello así tildaría yo a la concejala de normalización lingüistica gallega que ha comparado la violencia de género con la violencia de «obligar» a hablar en español.
Menuda manera de pensar. Yo diría que, comparada con los más de 400.000 casos de violencia de género que se estima que hay en nuestro país, esta mujer es afortunada de no tener ni idea de lo que eso significa. Pero para todas esas mujeres que la están sufriendo, o la han sufrido en sus cuerpos y en sus mentes durante toda su vida, imagino que les habrá provocado un auténtico sobresalto en las entrañas escuchar semejante desvarío por parte de una «presunta» representante de su género.
Después de ver y oir lo que ha sido capaz de decir semejante ser tan despreciable como para intentar confundir con sus argumentos en favor de la lengua un tema tan duro y cruel como el del maltrato o violencia de género, sólo se le puede responder de una manera. Deseándole que nadie le de la paliza que ella se ha ganado para que fuera capaz de comparar con conocimiento de causa lo que les ocurre a quienes realmente padecen esta lacra social de tan dificil erradicación.
Así que como estamos todos, salvo los que defienden la lengua vernácula de esta manera, en CONTRA DE LA VIOLENCIA de todo tipo y más aún de la que hoy nos ocupa, quiero reponderle con lo que una niña de quince años hizo para manifestar su rechazo . Así se lo explica mi hija Laura que lamentablemente desconoce el gallego, aunque tuvo que estudiar y aprendió catalán y euskera.
Va por todas las mujeres cuya sensibilidad les haga entender a las que sufren, aunque hayan tenido la suerte de no sufrirla por sí mismas.