Ya hice algún comentario de lo que suponía para muchos zaragozanos disponer del pase de noche, cosa que nos imposibilitaba acceder a determinados pabellones por la gran demanda de pases rápidos o cita previa que ya habían cubierto el cupo diario a nuestra entrada. Ayer, gracias a que los ciudadanos habíamos hecho llegar nuestras sugerencias a la organización y que ésta ha recibido las mismas tomando soluciones adecuadas a cualquier contingencia que se les va presentando, tuvimos ocasión de visitar el Pabellón de España.
(Aquí os dejo las fotos de ayer)
Todavía hubo un cierto desconcierto a la hora de recibir un cupón con el turno que nos correspondíó pero es de agradecer y reseñar esta buenísima actitud por parte de los encargados de la organización. Poco a poco van mejorando el servicio a los visitantes y ofreciendo nuevas alternativas y posibilidades para el disfrute mayoritario. Ayer la afluencia de «personal» (como se dice por estos lares), fué bastante menor que el día precedente, por lo que se podía hasta deambular sin miedo a tropezar con alguien.
El Pabellón de España ha despertado tanta expectación que es probablemente el más visitado de todos los que están a disposición de todos nosotros. Tal vez es cuestión de marketing o simplemente la belleza del edificio en sí mismo (obra del navarrico Francisco Mangado). En cuanto al interior, como siempre, es cuestión de gustos. Un buen audiovisual en una pantalla hemiesférica, y paseo por la «cultura» del agua a través de medios audiovisuales y maquetas. Restos fósiles, cristales rocosos de magnífico tamaño y gran valor, experimentos interactivos y una larga y variada sucesión de temas para conservar el agua y evitar su despilfarro. Un magnífico lugar para visitas «culturales» ahora que han acabado las clases. Con la colaboración de todos conseguiremos fundir un gran pedazo de Iceberg (léase aisber). Sin duda no defrauda, aunque a mí particularmente tampoco me entusiasmó. (Siempre poniendo peros a todo, pero es que soy así de rarito, además no dejan hacer fotos en el interior del pabellón).
Después de España nos apeteció irnos a dar una vuelta por el Caribe e hicimos un pequeño «crucero» por una serie de islas tan maravillosas como en su mayoría desconocidas. Haití, Antigua, Dominica, Barbuda, Granada, Jamaica, Trinidad, etc. Los audiovisuales son un pequeño «spot» publicitario de ellas y sin duda el plato fuerte lo constituye la recreación de una calle «tropical» con gran colorido y encanto. Deja un buen sabor de boca y se agradece el esfuerzo de haber podido participar de forma conjunta.
Lamia espero que tengas tiempo de ver con tranquilidad algunas de las cosas que voy poniendo como referencia. Espero que mi «parcialidad» sea contrastada por tu propia sensibilidad.
Me das una envidia tremenda. No he podido ver nada todavía… y creo que aún tardaré en poder disfrutarlo.