¿Qué hace diferente a una empresa de otra?. ¿Qué busca un cliente?. ¿Qué desea de un producto?… La mejor manera de saberlo es preguntárselo directamente al consumidor. Y eso es lo que pretende de todos nosotros una gran empresa de Turismo On-Line, Destinia, para satisfacer nuestras necesidades adaptándose a lo que buscamos. Basta con responder a esta pequeña encuesta que nos proponen y que sólo nos llevará dos minutos, cronometrados.
Cientos de interrogantes y miles de respuestas son las que surgen de manera inconsciente hasta saber por qué tomas una decisión a la hora de adquirir un determinado producto.
Siempre sorprende ver un establecimiento de cualquier tipo lleno a rebosar, mientras que el contiguo está vacío. Tal vez los productos sean similares, incluso mejores, pero hay un «no sé qué» que provoca rechazo. Tal vez sólo sea la iluminación, o el color del escaparate, el aspecto adusto del personal o la forma en que da el sol a la hora de mayor afluencia.
Misterios por resolver que han hecho que se desarrollen una serie de nuevas profesiones relacionadas con el mundo de la venta. Desde la formación de un buen comercial, el publicista, el técnico de ventas, la prospección de mercados, análisis de tendencias, etc., etc.
Pero llegó Internet y todo cambió porque aparentemente casi todo podría creerse que tiene las mismas posibilidades de éxito que un competidor. Pero los verdaderos expertos en Web 2.0, los posicionadores, la visibilidad, SEO… y todo un complejo mundo en el que ya trabajan para adaptar cualquier oferta a la demanda real del destinatario último, el cliente.
Imagino que conoceis, e incluso podeis estar participando, de una gran cantidad de encuestas que se ofrecen como forma de obtener ingresos. Al final se acaban convirtiendo es una forma más de rentabilizar tu opinión a base de contestar «voluntariamente» a las mismas. Para otros sencillamente es algo que no tiene ninguna utilidad.
Pero la que os he propuesto de Destinia, es sencilla, y sólo busca mejorar la calidad de su oferta en beneficio de todos. Espero que os animeis a responder a sus preguntas y dentro de nada observar algún cambio en un pequeño matiz que había pasado despercibido, y que ese «no sé qué» ha sido corregido gracias a vuestra inestimable colaboración. Gracias en su nombre.