Adelgace 20 kg. en una semana, pierda peso sin esfuerzo y sin regímenes, aprenda Inglés en un mes, refuerce su potencia sexual tomando estas pastillas, haga que su pelo vuelva a crecer. ¡Y así hasta infinitas formas!.
¿Quién no ha sentido la tentación de comprar algo de lo que se anuncia de manera tan atractiva?.
Cuando era más pequeño metían a los buzones una especie de «octavilla» en blanco y negro con varios productos de los conocidos como milagrosos. Posteriormente se comenzaron a incluir en revistas de «medio pelo» como «addendum» a toda página. Ahora con las nuevas tecnologías han descubierto la influencia de las «teletiendas». Cualquier soporte publicitario es bueno para convencernos de las maravillosas propiedades de lo que siendo benévolos no es más que una soberana mentira. Y lo que es peor, en muchos casos, una auténtica amenaza para nuestra propia salud.
No importa lo bien informados que estemos por parte de los especialistas, ni siquiera muchas veces depende del grado de formación o de lo inteligente que te creas ser. A veces los timos es más fácil hacérselos a quien más «listo» se cree. Ante todo precacución. Si los calvos lo son por razones genéticas, por muchas lociones, cremas o ungüentos que se apliquen sobre el cuero cabelludo, en poco tiempo «luciran»: ¡una estupenda calva!. Si la grasa se acumula en tu dermis a base de oligoelementos que no eliminas porque has comido en exceso, seguramente con darte una pomada que «quema» la grasa mientras duermes, justo al levantarte descubras que lo que mejor va para quemar grasas es un «soplete» de fontanero. Si lo que quieres es satisfacer a tu pareja durante un largo período de tiempo mientras estás adentrándote en la andropausia como un caballo desbocado, sería mejor que llamaras a un joven de unos veinte años para que te echara una manita con la tarea.
En fin que mucho ojito con los anuncios milagrosos de cualquier género. Para que os hagais una buena idea de lo que ocurrió cuando se descubrieron las propiedades terapeúticas del Radio, en Fogonazos podeis descubrir y comprobar las barbaridades que se comercializaron en base a ellas.
no se que pienses pero nunce me lo hubiera imaginado no me deja de sorprender el mundo
Muy interesante, linkeare tu blog desde mi sitio precio del dolar
Mientras exista gente que compre cosas como estas, segurán existiendo.
Un saludo!