Sumideros de dinero



Hace mucho tiempo que pienso en cómo ganar dinero haciendo lo mínimo o incluso sin pegar ni golpe. Tal vez alguno de vosotros hayais pensado lo mismo, aunque creo que soy un poco raro y la mayoría preferirá ganarlo con su sudor.

Lo que no me negareis es que estamos en una sociedad pensada para que funcione a base de la compraventa de bienes. Yo te vendo a tí mi trabajo y, con lo que obtengo, compro a otro sus  servicios o bienes. Mientras esta rueda gira todo parece funcionar.

Sin embargo por más que nos afanemos casi nunca llegamos a obtener todo lo que «queremos». Así que no nos queda otro remedio que afanarnos un poco más.

Hemos entrado en una dinámica en la que todo el mundo está frustrado por no llegar a alcanzar tantas cosas como pretendemos.

Mi idea es que actuamos como «hormiguitas» transportadoras de billetes. A los trabajadores se nos suministra una determinada cantidad de dinero para que lo vayamos moviendo a través del sistema. Cuanto más dinero nos ponen encima más viajes tenemos que realizar para conseguir «gastarlo» antes de que finalice el mes. A las hormigas más laboriosas se les premia con una mayor cantidad de tareas y se les anima a sentirse más importantes que el resto, puesto que hacen mover los engranajes con mayor rapidez.

Pero ¿a dónde va el dinero que mes a mes acarreamos y vemos desaparecer de nuestras manos con tantísima facilidad?. Mi respuesta es: Al Sumidero de dinero.

Al igual que los expertos en astronomía han demostrado la existencia de agujeros negros en el espacio, en nuestro sistema económico existen estos sumideros. El dinero siempre acaba engullido en alguno de ellos y sólo vuelve a aparecer cuando nos recargan la espalda con un puñado de monedas para que hagamos el reparto mensual.

Esta teoría no es nada científica, pero puede ser válida para que nos replanteemos si merece la pena tanto esfuerzo.

Hemos sido llevados de una forma inexorable a unas conductas estúpidas que nada tienen que ver con la felicidad. Primero nos han llenado la cabeza de necesidades «virtuales» y después nos han puesto más dificil poder alcanzarlas, así que a base de necesitar un piso, muebles, coche, móvil, ordenador, adsl, vacaciones, viajes, sanidad privada, seguros, ocio, Corte Inglés, etc. ,etc.etc. nos vamos viendo cada vez más lejos de cumplir con nuestros objetivos materiales. Así que nos han facilitado las cosas proponiendo hipotecas a 50 años, préstamos «impersonales», pago aplazado, tarjetas de crédito, anticipos de nómina y un largo etcétera que nos anima a mantener el sistema en funcionamiento.

Pero lo seguro es que aunque el dinero desaparezca de nuestras manos, en algún sitio tiene que acabar. ¿No?. 

4 respuestas a “Sumideros de dinero”

  1. A final de 2009, trabajaban para la sanidad privada unas 340.000 personas, sin que se hubieran registrado pérdidas de trabajo. Los médicos siguen siendo el grupo más representativo, pues 96.000 http://www.sanidadprivada.es ejercen en la sanidad privada. Y las enfermeras, el segundo colectivo en número, ssanion las que manifiestan un mayor descontento con sus condiciones salariales y laborales con respecto a la sanidad pública.

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