Desde que pusieron el AVE, apenas había necesitado usarlo un par de veces, claro que entonces estaba en activo y solía utilizar exclusivamente el avión.
Tampoco tenía blog, así que como tampoco soy japonés, no solía llevar una cámara de fotos donde registrar mis movimientos, y mis aficiones solitarias se reducían a leer el periódico.
Hoy he tenido que escaparme al «foro», a realizar el reconocimiento médico para ver si estoy o no en condiciones de recuperar mi certificado médico y poder volver al ejercicio de mi profesión… (lo tengo bastante crudo). Así que a las 7:00 h estaba iniciando viaje en esta maravilla tecnológica con destino Madrid- Atocha.
El tiempo total de viaje ha sido «de calzos a calzos» (es el tiempo de vuelo efectivo que se computa en los aviones desde que se inicia el rodaje hasta que se vuelve a aparcar a la llegada), de una hora y media. ¡Magnífico!.
Evidentemente le saca mucha ventaja al avión para este tipo de trayectos, puesto que no hay que estar embarcado con más de dos minutos antes de iniciarse el viaje, no hay que facturar equipaje, el control de seguridad es menos exhaustivo y sales desde el centro de la ciudad. Pero ¿qué os voy a contar que no sepais?.
La verdad es que es una auténtica comodidad sentarte a leer un rato, escuchar las conversaciones ajenas a través de los móviles, echar un vistacillo fugaz a las hojas de balances de los ejecutivos en sus portátiles e incluso escuchar una música (según gustos…) relajadamente, mientras intentas dar una cabezadita.
Pero a veces las cosas no son del todo perfectas, así que a la vuelta hemos estado parados en un túnel durante media hora. La información posterior ha sido escueta: «les comunicamos que debido a problemas en la vía, el tren lleva 35 minutos de retraso». Luego dicen que en los aviones no informamos debidamente al pasaje…
Eso sí mañana a presentar la correspondiente reclamación y supongo que nos harán un «descuentillo» en el trayecto. En eso tambien sale ganando el pasajero.
Y como sé que a muchos os gustan los trenes y las estaciones, he hecho unas fotos del Ave y de Atocha, justo antes de volver a casa con los «deberes» hechos.
Jubi Como siempre tus comentarios son un artículo en sí mismos. gracias. Lo del agujero negro que blanquean tiene mucha gracia.
Vito, si dan puntos por cada ilusión perdida y machacada por los gestores aéreos tengo muchos puntos acumulados, convertibles en trayectos de Ave. Pero la mano negra igual tiene miedo de que acabara yo solito con toda la RENFE. 😉
¿Para cuando la próxima convocatoria para maquinista del AVE? A lo mejor nos convalidan algo aunque sean las ilusiones.
Yo en el AVE todavía no he viajado y es que no me fío de las aves que al pasar por La Muela no se dejen las alas en los molinos de viento, o con suerte en Calatayud no se desvíen al embalse de La Tranquera a repostar combustible y alimento, que las truchas están deliciosas, pero perderían mucho tiempo.
Suerte con tus reconocimientos.
¡Les habla el capitán de la aeronave! Nos hemos metido en un agujero negro, tendremos que esperar unas horas hasta que lo blanqueen.
– Jubi, ves como en los aviones también informan de lo que pasa…
Claro, estaban sobrevolando La Muela.