Wunderbar no es un bar alemán, ni significa pabellón, sino que es una expresión que puede ser adjetivo o adverbio de modo y cuyo significado en español es uno de los siguientes:
Para los que no quieren leer más pueden ver desde aquí las fotos del Pabellón de Alemania.
Después de visitar el Pabellón alemán de la Expo lo más adecuado es decir BUNDABA.
Compensa incluso la cola de una hora de espera que tuvimos que hacer para poder visitarlo; pero hasta el momento es de los que más sorpresa me ha producido visitar. No exactamente sorpresa, puesto que siempre he sido un «admirador» de la forma de trabajar en Alemania. Todo organizado hasta el más mínimo detalle y con una mentalidad de gestión donde casi no hay sitio para los imprevistos. Claro que, si ocurren, la agilidad mental de los latinos da con soluciones muy prácticas en poco tiempo. Todo esto entiéndase desde el punto de vista de las horribles generalizaciones, porque ni todos los latinos somos tan creativos, ni todos los alemanes son tan «cuadriculados». Incluso en Alemania se suele generalizar diciendo que los Austríacos son los auténticos «cabezas cuadradas».
La visita se hace cómodamente reclinado en una barca para dos que te va llevando por una presentación donde tienes la sensación de estar en Disney World. Finalizado el viaje te encuentras de lleno con auténticas joyas del tratamiento y reutilización de agua a base de filtros de agua, pozos naturales donde se filtra el agua del río (especialmente en Berlín, donde el agua potable se extrae de pozos directamente del río Spree y Havel, a una profundidad de unos 50 m. ya filtrada por el propio subsuelo) y una cultura de protección del medio ambiente con muchos años de desarrollo y tecnológicamente avanzadísima.
Sin lugar a dudas es uno de los pabellones más diferentes de los que he tenido ocasión de visitar. Así que sólo puedo decir de él que WUNDERBAR!.
Os sugiero leer lo que escribí al respecto de la precisión alemana y algunos comentarios»OFENDIDOS» con los que enriquecieron mis apreciaciones.